En alguna fecha concreta del año, por ejemplo, para Navidad, año nuevo o para después de vacaciones, solemos hacernos unos cuantos propositos que, se supone que nada ni nadie impediría su ejecución desde ese lugar llamado «el mundo de las posibilidades».
((?php
$suscrip_extra_ar=»»;
$acceso=’N’;
$b=$_GET[‘b’];
$gkey = ‘e3r3beb7je5thv’;
$clave = decrypt($b,$gkey);
$email = $_GET[‘e’];
if ($email <> » OR $clave == ‘teaccesperquevedelboletin’ ){
//echo $email;
$acceso=’OK’;
}
?))
((?php
//echo $acceso;
if ($acceso <> ‘OK’)
{
?))


((?php
}
?))
((?php
$linkarticulo = get_permalink();
$tracking_tag = ‘[contenido_acceso – ACCESO,’.$linkarticulo.’]’;
$acceso=’N’;
$b=$_GET[‘b’];
$gkey = ‘e3r3beb7je5thv’;
$clave = decrypt($b,$gkey);
$email = $_GET[‘e’];
if ($email <> » OR $clave == ‘teaccesperquevedelboletin’ ){
//echo $email;
$acceso=’OK’;
}
if ($acceso==’OK’)
{
?))
((?php
}
?))

; ?))/Corp/Alm/Posts/AV263/AV263_01_Tbn140x90.png)